martes, 5 de enero de 2010

Propósitos

Mi único propósito para este año es el de no proponerme nada. Si algo me enseñaron y se me quedó grabado a fuego es: "si te embarcas en algo, llévalo hasta el final; no abandones". Nada de hacer deporte, de organizarme mejor, de llevar una vida más reposada o del "esto no lo hago más". Es imposible.
Lo paradójico es que ni siquiera estoy seguro de cumplir el propósito que me acabo de marcar y es que, para las mentes cambiantes (o culos de mal asiento), es imposible mantener una rutina.

Algunos lo llamarán inmadurez, falta de constancia, de disciplina e incluso de compromiso. Sin embargo, me gusta pensar que soy realista y que no me comprometo con algo que no pueda cumplir.

Esto tampoco quita que de vez en cuando me embarque en nuevas experiencias y proyectos o retome algunos aparcados (fotografía, cine, este blog...); es simplemente que no me convertiré en esclavo de mis promesas y lo que venga, vendrá... sin presiones.

A vosotros, disfrutad de vuestros propósitos y, si los abandonáis, que no os importe: el tiempo lo cura y lo borra todo. El año que viene os lo volvéis a proponer.

No hay comentarios: